El proceso creativo suele ser introspectivo y solitario, pero para la artista Desirée Moreno, participar en Open Portfolio Bilbao supuso justo lo contrario: un espacio para compartir, conectar y seguir creciendo.

“Desde el principio se genera un clima muy agradable, de confianza y amistad. El ambiente es muy familiar”.

Desirée destaca la importancia de generar este tipo de encuentros: espacios donde intercambiar pensamientos, miradas y formas de hacer con otros artistas. Pero también la oportunidad de acercar el trabajo al público, contarlo y explicarlo en primera persona:

“Es un vehículo para dar a conocer tu trabajo. En definitiva, es una red que comienza a tejerse durante el Open y que continúa expandiéndose una vez finalizada”.

Para ella, Open Portfolio es una iniciativa que da voz y visibilidad a la gráfica emergente:

“Representa una oportunidad para dar proyección a este mundo tan pequeñito y, a veces, tan desconocido”.