Beatriz
Carcamo Bravo

En los últimos años mi trabajo ha girado básicamente alrededor de temas recurrentes
una idea desemboca en una imagen,a veces sin un método fijo, o sin un fin concreto,la imagen
aparece y se desarrolla, así surge los símbolos ,creciendo y generando material : una colección.
Este proyecto nace del sedimento de una experiencia de plenitud, que he intentado hacer perdurar
en el tiempo, por su gran poder de transformación y de armonía que reporta.
Mi deseo es que sea recordado y que sea capaz de generar emociones paralelas que estimulen
sensaciones y permitan soñar.
Creo que las relaciones humanas y la búsqueda de la naturaleza como centro y equilibrio del ser, es
lo que más impacto tiene para mí a la hora de influir en mi trabajo.
Me gusta mucho la idea de que una obra pueda funcionar como un foco para la contemplación y la
reflexión, que de alguna manera, pueda servir como una puerta de entrada tanto a la memoria
colectiva como a lo íntimo.
Introduzco el lado oculto de la naturaleza humana como motivo de mi búsqueda personal.Todos los
sentimientos y capacidades rechazados por el hombre ,y desterrados a la sombra, alimentan el poder
oculto del lado oscuro de la naturaleza humana , así la sombra permanece conectada con las
profundidades olvidadas del alma,con la vida y la vitalidad, siendo ahí mismo donde se puede
establecer contacto con lo superior, con lo creativo,si logramos desarrollar un diálogo con ella,
comenzamos a integrarnos, y a crear un lenguaje , el lenguaje entre la sombra y uno mismo: para mi
ese es el espacio de la inspiración.
Dibujar,desde mi punto de vista, es un proceso de observación y de expresión, de recibir y dar al
mismo tiempo,
un dibujo mira simultáneamente hacia dentro y hacia fuera,hacia el mundo observado e imaginado y
hacia mi misma y mi mundo mental.Constituye una excavación de mi pasado y de mi memoria.
En mis dibujos, en mi obra ,mezclo la memoria,la percepción y el sentido que tengo de mi “yo” y de la
vida.